Después de María, Madre de Dios, ningún santo ocupa tanto espacio en el Magisterio papal como José, su esposo. Las reflexiones del Papa Francisco retoman el mensaje contenido en los pocos pasajes de los Evangelios sobre San José transmitidos para destacar aún más, como lo hicieron sus predecesores, su papel central en la historia de la Salvación: el Beato Pío IX lo declaró «Patrón de la Iglesia Católica», el Venerable Pío XII lo presentó como «Patrón de los Trabajadores» y San Juan Pablo II como «Guardián del Redentor».
Hoy, día 1 de mayo, fiesta de San José Obrero, Cristina Ansorena nos acerca a la figura de San José a través de las palabras del papa en su carta Patris Corde y nos cuenta cómo eran las bodas en la Palestina judía del siglo I. Queda inaugurada la serie de mayo de un episodio diario sobre la vida de la Virgen María por Tierra Santa que diferentes autores nos irán ofreciendo a lo largo de todo el mes.
Imagen de San José en el patio anterior a la Casa de la Sagrada Familia en Nazaret.